7 PECADOS CAPITALES DEL EMPRENDEDOR
1. NO SE VALIDA LA IDEA PRIMERO.
Hay que desmitificar la sensación de que la buena idea es suficiente para que alguien te compre. Tu cliente no te va a comprar sólo porque es una buena idea. Es el perfil de muchos emprendedores enamorados de su idea: han descubierto algo que para ellos es fabuloso, pero no se han parado a pensar en que en el mercado puede haber productos o servicios sustitutivos que lo pueden suplir o complementar. .
2. MIEDO AL FRACASO.
No se trata sólo del miedo a arriesgar una inversión económica, sino también hacer equilibrios para conciliar una aventura empresarial con la vida familiar. Un buen emprendedor, no es alguien que no tiene miedo, sino alguien que consigue que el miedo juegue en su favor.
3. EXCESO DE PLANIFICACIÓN.
Tienes que conocer tus estimaciones para saber qué puedes cambiar en el caso de que entren nuevas prioridades. Ve creciendo poco a poco. Comienza a pequeña escala. De esa manera podrás ir midiendo la viabilidad de tu idea progresivamente, lo que te permitirá corregir errores y ganar confianza.
4. POBRE GESTIÓN FINANCIERA.
Los emprendedores no se paran a pensar en las implicaciones económico–financieras. Hay que evaluar las decisiones, su impacto. ¿Esto lo fabrico o lo subcontrato? ¿Cómo llego a los clientes: con una fuerza comercial propia o a través de una alianza? Todo esto, al final se traduce en ingresos.
5. FALTA DE ESTRUCTURA CUANDO CRECE.
Cuando tu negocio crece, no tienes más remedio que organizar a tu equipo: ¿Tienes que plantearte ya departamentos? ¿Mandos intermedios? ¿Evaluación del rendimiento?. .
.
6. NO SE TOMAN MEDIDAS PARA ESCALAR EL NEGOCIO.
Los modelos escalables son capaces de generar ingresos de forma más rápida de lo que crece su estructura de costes. Y los no escalables son aquellos donde su estructura de costes crece de forma lineal a sus ingresos, es decir, que para ganar más hay que gastar más.
7. EMPRESA SIN VISIÓN.
Resulta fundamental la capacidad para proyectar un negocio más allá del corto plazo. Resulta básico que el emprendedor tenga un proyecto, y que sea bueno, pero, sobre todo, que lo visualice. Difícilmente triunfa una persona que sólo piense a corto plazo todo el tiempo.
Hay que desmitificar la sensación de que la buena idea es suficiente para que alguien te compre. Tu cliente no te va a comprar sólo porque es una buena idea. Es el perfil de muchos emprendedores enamorados de su idea: han descubierto algo que para ellos es fabuloso, pero no se han parado a pensar en que en el mercado puede haber productos o servicios sustitutivos que lo pueden suplir o complementar. .
2. MIEDO AL FRACASO.
No se trata sólo del miedo a arriesgar una inversión económica, sino también hacer equilibrios para conciliar una aventura empresarial con la vida familiar. Un buen emprendedor, no es alguien que no tiene miedo, sino alguien que consigue que el miedo juegue en su favor.
3. EXCESO DE PLANIFICACIÓN.
Tienes que conocer tus estimaciones para saber qué puedes cambiar en el caso de que entren nuevas prioridades. Ve creciendo poco a poco. Comienza a pequeña escala. De esa manera podrás ir midiendo la viabilidad de tu idea progresivamente, lo que te permitirá corregir errores y ganar confianza.
4. POBRE GESTIÓN FINANCIERA.
Los emprendedores no se paran a pensar en las implicaciones económico–financieras. Hay que evaluar las decisiones, su impacto. ¿Esto lo fabrico o lo subcontrato? ¿Cómo llego a los clientes: con una fuerza comercial propia o a través de una alianza? Todo esto, al final se traduce en ingresos.
5. FALTA DE ESTRUCTURA CUANDO CRECE.
Cuando tu negocio crece, no tienes más remedio que organizar a tu equipo: ¿Tienes que plantearte ya departamentos? ¿Mandos intermedios? ¿Evaluación del rendimiento?. .
.
6. NO SE TOMAN MEDIDAS PARA ESCALAR EL NEGOCIO.
Los modelos escalables son capaces de generar ingresos de forma más rápida de lo que crece su estructura de costes. Y los no escalables son aquellos donde su estructura de costes crece de forma lineal a sus ingresos, es decir, que para ganar más hay que gastar más.
7. EMPRESA SIN VISIÓN.
Resulta fundamental la capacidad para proyectar un negocio más allá del corto plazo. Resulta básico que el emprendedor tenga un proyecto, y que sea bueno, pero, sobre todo, que lo visualice. Difícilmente triunfa una persona que sólo piense a corto plazo todo el tiempo.
Comentarios
Publicar un comentario